El ministerio de Cultura ha concedido a Francisco Rivera Ordóñez la medalla de las Bellas Artes por: "La defensa de la Fiesta a través de la labor como empresario de la plaza de toros de Ronda, y por ser representante de una estirpe de gran tradición en la tauromaquia".
Leo la carta que han enviado a los medios de comunicación dos de los premiados en ediciones anteriores, Francisco Camino Sánchez y José Tomás Román Martín, y la verdad, es que casi me da un infarto, porque la redacción del texto es pésima y casi no hay pausas, por lo tanto, es imposible leerlo de un tirón. Dice el texto:"Por vergüenza torera ... Las devolvemos porque no merecen el lugar de honor que nuestros recuerdos ocupan tantos otros reconocimientos que nos han sido otorgados y que sí son muestra de comprensión hacia nuestro quehacer artístico. Conservarlas sería menospreciar el valor de aquellos." No se entiende lo que quieren decir los toreros, pero nos hemos enterado que no están de acuerdo con el premiado de este año, porque dicen que no se lo merece. Yo les recomendaría más humildad; y contratar un gabinete de comunicación, porque su escrito no se entiende. Si yo fuera Francisco Rivera, no recogería la medalla porque hay gente que tiene la medalla de Bellas Artes y no sabe escribir correctamente.
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