Algunos han puesto el grito en el cielo, porque las cofradías y hermandades de Semana Santa han manifestado su oposición al aborto, y han comunicado públicamente: "La defensa a ultranza de la vida humana desde el primer momento de su concepción hasta su muerte natural, así como su rechazo a teorías que puedan propugnar lo contrario". No me extraña lo más mínimo que estas instituciones hayan hecho estas declaraciones, porque el derecho de la iglesia dice respecto a ellas: "Existen en la iglesia asociaciones ... en las que los fieles, clérigos y laicos, o clérigos juntos con laicos, trabajando unidos, buscan fomentar una vida más perfecta, promover el culto público, o la doctrina cristiana, o realizar otras actividades de apostolado, a saber, iniciativas para la evangelización, el ejercicio de obras de piedad o de caridad y la animación con espíritu cristiano del orden temporal".
No pertenezco a ninguna cofradía de Semana Santa, pero sé que se rigen por unos estatutos que deben ser aprobados por la jerarquía eclesiástica. Por lo tanto, no nos extrañemos que estén a favor de la vida, lo raro sería que estuvieran a favor de "la cultura de la muerte".
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