lunes, 29 de septiembre de 2014

Todo el mundo habla de la beatificación

Desde que volví de la beatificación de don Álvaro del Portillo, el sábado pasado, todo el mundo habla de lo bien organizado que estaba todo, y del ambiente de piedad que había durante la ceremonia.
Hoy en mi colegio los padres, alumnos,  profesores, todos estaban contentísimos de haber participado en la beatificación.
Resaltar la labor de los voluntarios,que han participado de mi colegio, son los que más han disfrutado haciendo la vida agradable a los demás.

domingo, 28 de septiembre de 2014

Beatificación de Álvaro del Portillo

Soy uno de los mil y pico de personas de Jaén, que ayer asistieron a la beatificación de Álvaro del Portillo en Madrid.
A las doce en punto, empezó la ceremonia presidida por el cardenal Ángelo Amato, prefecto de la congregación para las causas de los santos.  
Podría destacar muchas cosas de las que aprecié a lo largo de las dos horas y media que duró el acto: Mensaje del papa Francisco al prelado del Opus Dei; la cantidad de obispos y cardenales que asistieron a la ceremonia, 100 0bispos y 20 cardenales; los sacerdotes que distribuyeron la comunión; el número de voluntarios, alrededor de 3500; la organización del acto; el buen tiempo, etc.
Pero lo que más me chocó fueron dos hechos. El primero, la piedad de las más de 200.000 personas que había en Valdebebas. No se oía nada, sólo las respuestas y los cantos de la ceremonia. La segunda, los diferentes idiomas que oía a mi alrededor, antes y después de la misa: inglés, portugués, alemán, japonés, chino, francés, finés, italiano, ruso, etc.