Sí, ¡vaya agujero, en el que nos ha metido Zapatero! Pensándolo mejor, no sólo ha sido él, sino también todos aquellos hasta ahora le han mantenido y apoyado. ¿Cómo es posible que una persona con su manera de gobernar pueda hacer sufrir a tantas personas? Podemos hacer un poco de memoria histórica, y recordar cómo se encontraba nuestra Nación cuando Zapatero llegó al poder, en niveles de: desempleo, superávit, etcétera.
¿Cuántas veces hemos visto incumplidos tantos mensajes y predicciones? El paro lejos de aumentar, disminuirá; que no habrá subida de impuestos; que no hay crisis económica y, un largo etcétera. ¿Cuántas veces se nos ha dicho una cosa, y al poco tiempo, se ha hecho la contraria?, por ejemplo en julio pasado, aseguraban con rotundidad que nunca subirían los impuestos, y dos meses después imponían una subida del IVA y del IRPF. ¿Cuántas veces, hemos contemplado que el dinero recaudado por el Estado, que tanto trabajo y esfuerzo nos ha costado, se emplea en asuntos dudosos o innecesarios? ¿Cuántas veces hemos presenciado la adopción de medidas, que en muchos casos han sido improvisadas, tardías e insuficientes? No hace mucho tiempo, Zapatero nos decía que jugaríamos la Champions Lige, que ya habíamos superado a Italia, y que muy pronto adelantaríamos a Francia, ahora resulta, que no sólo no alcanzamos a Francia, sino que hasta necesitamos ayuda de ellos. Es necesario recordar que durante el mandato del señor Zapatero las personas en paro han conseguido duplicarse, hemos pasado de menos de 2 millones, a más de 4 millones de personas en el desempleo; que los trabajadores, no se podrán jubilar con menos de 65 años, que será necesario prolongar dos años más su vida activa, cuando muchos de ellos llevan trabajando más de 40 años. ¿Cómo es posible que tengamos la mayor tasa de desempleo de la Unión Europea, y que dupliquemos el porcentaje de la media de los países que la componen? Todas estas cosas, y muchas más, son las que tenemos que agradecer a Zapatero. Por eso, me parece necesario que aprendamos esta dura lección, y que los partidos políticos tomen medidas, para que estas situaciones por el bien de todos no vuelvan a repetirse, evitando que una persona pueda meter en un agujero a todo un País.
Plácido Cabrera
¿Cuántas veces hemos visto incumplidos tantos mensajes y predicciones? El paro lejos de aumentar, disminuirá; que no habrá subida de impuestos; que no hay crisis económica y, un largo etcétera. ¿Cuántas veces se nos ha dicho una cosa, y al poco tiempo, se ha hecho la contraria?, por ejemplo en julio pasado, aseguraban con rotundidad que nunca subirían los impuestos, y dos meses después imponían una subida del IVA y del IRPF. ¿Cuántas veces, hemos contemplado que el dinero recaudado por el Estado, que tanto trabajo y esfuerzo nos ha costado, se emplea en asuntos dudosos o innecesarios? ¿Cuántas veces hemos presenciado la adopción de medidas, que en muchos casos han sido improvisadas, tardías e insuficientes? No hace mucho tiempo, Zapatero nos decía que jugaríamos la Champions Lige, que ya habíamos superado a Italia, y que muy pronto adelantaríamos a Francia, ahora resulta, que no sólo no alcanzamos a Francia, sino que hasta necesitamos ayuda de ellos. Es necesario recordar que durante el mandato del señor Zapatero las personas en paro han conseguido duplicarse, hemos pasado de menos de 2 millones, a más de 4 millones de personas en el desempleo; que los trabajadores, no se podrán jubilar con menos de 65 años, que será necesario prolongar dos años más su vida activa, cuando muchos de ellos llevan trabajando más de 40 años. ¿Cómo es posible que tengamos la mayor tasa de desempleo de la Unión Europea, y que dupliquemos el porcentaje de la media de los países que la componen? Todas estas cosas, y muchas más, son las que tenemos que agradecer a Zapatero. Por eso, me parece necesario que aprendamos esta dura lección, y que los partidos políticos tomen medidas, para que estas situaciones por el bien de todos no vuelvan a repetirse, evitando que una persona pueda meter en un agujero a todo un País.
Plácido Cabrera
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