Hace unos días saltaron a los medios de comunicación las palabras de Montserat Nebrera, dirigente del PP en Cataluña, al decir: "que la ministra de fomento tenía un acento de risa". Pero eso no fue lo peor, sino que también comentó que cuando llamaba por teléfono a un hotel del Córdoba, el que descolgaba el teléfono no se le entendía.
Como se dio cuenta que había metido la pata, pidió disculpas, no por lo de la ministra, sino por lo del recepcionista del hotel. Yo mismo la vi y escuché en "El gato al agua" en Intereconomía. Montserrat dijo que se le había malinterpretado porque sus abuelos son de Baeza, y ella estaba feliz de tener familia andaluza.
Hace unos días apareció en El Mundo con esta "guisa": Barratina catalana y envuelta en una bandera andaluza. Me parece que se ha vuelto a pasar la señora Nebrera, porque esta foto desdice de una política como ella, que debe de ser una persona seria. Cuando se mete la pata, se saca, y no hacemos tonterías y cosas que no pegan en una política como ella.
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